Adelaida y Michelle

Me escribe Adelaida: "Qué pasa contigo querido Jaime, que ni siquiera has hecho un mísero comentario del mensaje de nuestra querida Michelle en tu blog? Lo que es a mi, me encantó. Me gustó el toque femenino, acogedor, amistoso, etc., etc. de su discurso. Cariños, Adelaida".
Lo que pasa, amiga es que hice un mísero comentario, pero para ti fue insuficiente.
Porque en realidad cuando hay tanto comentarista, uno más no tiene sentido. Si, claro, fue bueno, fue acogedor, fue amistoso, pero no es lo que uno espera en términos de grandes lineamientos para una persona que se propone reformular bases de un proyecto.
Que sea femenino no es un mérito en una mujer. Creo que esa familiaridad a la que aludes, es a veces un intento de ser excesivamente jocosa y no sé si me gusta. En ese ámbito, al menos. Si el discurso lo hubiera hecho un hombre y le hubiera echado bromas a las mujeres tendríamos hoy un escándalo de las feministas.
No me gusta tanta referencia a sí misma ni que hable tanto en primera persona de singular. De una mujer en política esperaba más plural.
Pero, está bien. No es más que eso, pero es más que muchos.
En fin... más que de discursos, quiero ver realidades. Confío en que las tendrá, a pesar de algunos de sus ministros y de algunas de sus ministras.
Apoyemos, esperemos, confiemos.
Sigamos conversando, Adelaida.
Tú eres hincha de Michelle, yo soy solo partidario. Soy más hincha tuyo.
Jaime