Mi amiga Adelaida sugiere, en su mensaje, que comente algo acerca de la encargatoria de reo de Pinochet.
Cuesta mucho hacerlo, especialmente porque me parece algo increíble. Recuerdo que en las largas esperas de alegatos, declaraciones de perseguidos o antesalas de audiencias, los abogados de derechos humanos comentábamos sobre el futuro. Nunca pensamos - aunque quisiéramos - que Contreras, Pinochet y otros, llegarían a la situación procesal que han llegado. Menos aun cuando vimos cómo partió la transición, tan proclive a transar para transitar, a ceder antes que le pidieran nada.
Recuerdo que la noche del día en que Pinochet compareció por primera vez ante un juez del crimen - ¿Guzmán era? - cenamos con Roberto Garretón en casa de Alonso Baeza Rivera y Margarita Foncea. Y brindamos por haber logrado algo más allá de todo lo que creímos posible alguna vez.
Cuando hay voces que piden más y más, yo pienso en que la ambición rompe el saco como me enseñó mi nana a los cuatro años.
El peor sufrimiento de Pinochet es haber transitado por todo lo que él ocasionó a terceros: cárcel que considera injusta, detenciones que considera arbitraria, necesidad de presentar recursos de amparo, exilio, dorado pero exilio al fin. Pero con algo peor: porque hay veces en que la muerte salva y la sobrevida duele. Y él sigue viviendo. Quizás muera este año. Pero muchas veces imagino que es inmortal y sonrío elucubrando sobre lo que significaría seguir viendo avanzar generaciones y dándose cuenta que ya no sólo es del pasado para sus antiguos patidarios, sino que todos querrán sepultarlo en vida. García Márquez escribiría algo entre el otoño del Patriarca y aquel coronel que no tenía quien le escribiera.
Cuesta mucho hacerlo, especialmente porque me parece algo increíble. Recuerdo que en las largas esperas de alegatos, declaraciones de perseguidos o antesalas de audiencias, los abogados de derechos humanos comentábamos sobre el futuro. Nunca pensamos - aunque quisiéramos - que Contreras, Pinochet y otros, llegarían a la situación procesal que han llegado. Menos aun cuando vimos cómo partió la transición, tan proclive a transar para transitar, a ceder antes que le pidieran nada.
Recuerdo que la noche del día en que Pinochet compareció por primera vez ante un juez del crimen - ¿Guzmán era? - cenamos con Roberto Garretón en casa de Alonso Baeza Rivera y Margarita Foncea. Y brindamos por haber logrado algo más allá de todo lo que creímos posible alguna vez.
Cuando hay voces que piden más y más, yo pienso en que la ambición rompe el saco como me enseñó mi nana a los cuatro años.
El peor sufrimiento de Pinochet es haber transitado por todo lo que él ocasionó a terceros: cárcel que considera injusta, detenciones que considera arbitraria, necesidad de presentar recursos de amparo, exilio, dorado pero exilio al fin. Pero con algo peor: porque hay veces en que la muerte salva y la sobrevida duele. Y él sigue viviendo. Quizás muera este año. Pero muchas veces imagino que es inmortal y sonrío elucubrando sobre lo que significaría seguir viendo avanzar generaciones y dándose cuenta que ya no sólo es del pasado para sus antiguos patidarios, sino que todos querrán sepultarlo en vida. García Márquez escribiría algo entre el otoño del Patriarca y aquel coronel que no tenía quien le escribiera.
2 comentarios:
Jaime,
creo que chilenos de todos lados compartimos el asombro frente a lo que nunca creimos que pasaria. Personalmente lo que me ha quedado dando vueltas es ese careo Pinochet-Contreras, una escena que parece de pelicula (de seguro se transformara en una), con Contreras pasandole la pelota y Pinochet devolviendosela. Que ese solo dialogo haya finalmente tenido lugar y lo hayamos conocido me da esperanzas para el futuro.
Finalmente, sabias que la BBC esta preparando una serie sobre Pinochet? El personaje sera encarnado por Sir Derek Jacobi, el mismo que hizo "Yo Claudio". Que te parece?
Paz
pd: respondi a tu comentario alli mismo en mi blog, con link a una foto y todo. Y salgo mejor que la senora alemana! Un abrazo.
padre, gracias por tu comentario para cristián a quién tampoco conozco, pero comparto algunas de sus posturas.
a veces en la calentura de la rabia, por la vida de mierda que vivimos en este sistema (suena muy punk, pero es cierto), nos olvidamos de hacer las distinciones que se deben hacer...
Cristián; te contesto como me contestó mi abuelo Alejandro en su casa cuando Aylwin le fue a pedir que renunciara a su precandidatura presidencial por los Independientes por el NO y yo de 14 años me entristecí porque pensaba que mi abuelo podría haber sido Presidente de Chile:.."las guerras las pelean y las ganan los ejércitos en las trincheras, que sufren toda la crudeza de la guerra y, cuando ganan la batalla se van a los hospitales, entonces aparece el ejército de ocupación que se roba los bancos y los muesos, viola las mujeres y atormenta a la población derrotada... yo no quiero se parte de eso".
Nos vemos el 18!!!!!!!!
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