sábado, noviembre 18, 2006

De la Contraloría, ahora

Respirar hondo y seguir avanzando.
¿Por qué se rechazó a Pablo Ruiz Tagle para la Contraloría?
Porque el ánimo de algunos es impedir que la Presidenta pueda hacer lo que debe hacer (poco ayudan en su tarea Ministros inexpertos unos y demasiado expertos en maniobras otros).
Dudo que se pueda encontrar a otro candidato como él, ya que en la Concertación puede haber algunos muy buenos (Rodrigo Asenjo, sin ir más lejos o Pablo Hales para recomendar de cerca, a pesar de su juventud), pero la ventaja de Ruiz Tagle es que es un "liberal" al estilo canadiense, es decir, un sujeto que cree en la libertad no como el sustento del capitalismo, sino del progreso humano y eso lo distancia de las cuestiones partidistas. Hombre justo, correcto, ponderado, inteligente, algo vanidoso y autosuficiente (como debe ser todo contralor), de convicciones profundas y estilos tajantes.
Zaldívar el resentido, Ávila el rebelde sin causa, Ruiz Esquide desorientado y la derecha en bloque, declaran preferir a un burócrata de carrera. Cuando la Contraloría requiere cambios, prefieren a uno de los que ha sostenido un estilo y una tradición que ya están agotadas.
Confieso, sin embargo, que si van a nombrar a uno de ellos, mi candidata es Patricia Arriagada, la más inteligente de los tres. Quizás por eso no la nombren, ya que la derecha prefiere el estilo obsecuente de un Sergio Fernández o un Jorge Reyes, fielmente representados por los estilos de los otros auto candidatos internos.
Poner problemas es la tónica vigente. Pocos buscan soluciones.
Cansa, cansa mucho, cuando hay tanto que hacer.

1 comentario:

Paz dijo...

Jaime, comparto contigo la sensacion de perplejidad ante el desilusionante rechazo de Ruiz Tagle gracias al criterio chato de nuestros parlamentarios. Un tipo inteligente, con un curriculum que pocos en Chile pueden exhibir, probo, sin militancia... yo creo que la Presidenta no penso que Chile podria perderse un contralor asi. Y sin embargo sucedio. Que chance tiene la gente capaz y sin militancia de llegar a un puesto que permita hacer una contribucion real al trabajo publico? Si esta mentalidad no cambia pronto, no se como el aparato estatal puede dar atisbos de mejorar.